7.17.2011

Bulimia y anorexia: crónica de una obsesión

VIVIR DE LA APARIENCIA SIN LLEGAR A SER FELIZ

La anorexia y la bulimia son -junto con la obesidad- los más renombrados trastornos de la alimentación; con un común denominador claro y preciso: la búsqueda desenfrenada de la delgadez como medio para alcanzar el éxito y la aceptación social. Pero.. ¿ en que se diferencian ambas enfermedades? En el caso de la anorexia se basa en una obsesiva búsqueda de adelgazamiento mediante una dieta progresivamente restringida. Hay una distorsión de la percepción del propio cuerpo. La bulimia , en cambio, es la ingesta excesiva de alimentos que después se intentan compensar con conductas anómalas como vómitos, abuso de laxantes y diuréticos, o dietas restrictivas intermitentes; lo que termina convirtiéndose en una costumbre que modifica la conducta de la persona enferma.Quienes las sufren tienen en común un problema de base psicológico :baja autoestima, inseguridad, ansiedad etc. Los datos hablan por si solos: en los últimos diez años el incremento del número de afectados por anorexia y bulimia ha sido galopante. En la actualidad, en los países desarrollados, los trastornos alimenticios afectan aproximadamente a una de cada 200 jóvenes de entre 12 y 20 años y aunque las adolescentes siguen siendo el colectivo más afectado, los varones, las mujeres maduras y los niños/as menores de 12 años comienzan a sumarse a la lista de víctimas que padecen dichos trastornos. Es lamentable percibir cómo los seres humanos reciben miles de mensajes publicitarios al día con un único mensaje: delgadez es igual a felicidad y éxito; lo que da como resultado: insatisfacción corporal y personal . Ser discriminado por la gordura es moneda corriente. Esto se vuelve potencialmente peligroso sobre todo en el caso de los adolescentes, con la importancia que implica para ellos “encajar” y ajustarse a los cánones socialesTanto en el caso de la anorexia como en el de la bulimia, hay que tener en claro que el problema no es la alimentación, sino el modo en que la persona se valora y se percibe a sí misma. Es decir, estamos hablando de un problema de salud mental que tiene tratamiento y que hay que intentar prevenir. El aceptarse tal y cuál se es, es la verdadera clave para estar sano externa e internamente.
El silencio nos conecta de formas que las palabras no pueden.
No podes cambiar a alguien o algo.. sin destruir lo que fue... osea sin destruir su pasado nadie puede tener un presente, Y menos un futuro-